martes, 19 de abril de 2011




No necesitás vestirte mejor que los demás,
ni tener el corte de pelo distinto.
No necesitás tener las mejores notas,
ni saber escribir y hablar como un diccionario.
No necesitás bailar a la perfección,
tampoco cantar, en realidad.
No necesitás tener toda la plata del mundo,
ni las cosas más lujosas.
No necesitás ser el más lindo de la ciudad,
ni que todas las chicas mueran de amor por vos.
No necesitás tener el mejor cuerpo,
ni ir al gimnasio todos los días, religiosamente.
No necesitás ser genial, ni el más simpático,
ni el más inteligente, ni el que se acerca más a la perfección.


Necesitás ser vos, para ser parte de mí.
Y, por suerte, ya lo sos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario